Me
encuentro entre las cuatro paredes de mi cuarto con la luz bajita y los sonidos
de las teclas de mi computador especulando que a veces tú
mi amor, conoces todos los rincones de mis pensamientos,
y alucino que tú sabes, que en ellos habitas tú. Es
tan difícil tener un amor en secreto, no poderte mirar a los ojos y decirle que
me importas mucho más, de lo que jamás me imaginé, que necesito de
tus palabras, de tus abrazos, de tu presencia, de ti en mi vida. El
amor en silencio, te exige que el solo roce de sus manos es
conseguir la gloria, que la mirada fugaz consuela las inmensas ganas de
sentirle cerca, que una sola palabra de sus ardientes labios choquen con el
sonido del viento que trae su voz, es sólo el palpitar del corazón enfurecido
por no tener la esperanza de compartir sus sentimientos. Muchas veces la
soledad y la tristeza me embargan, pero no es por cansancio, es sólo que me
desespero y quiero tenerte conmigo. En ocasiones siento que mi corazón se
desgarra en pedazos, luego una suave brisa entra por mi cuarto y es cuando
siento que estás presente, aunque no estés aquí. No sabes la felicidad que
irradia en mí, al verte caminar por la calle con sus pasos de inocencia frágil
y sus movimientos que estremece lo más escondido del pensamiento y de un
sentimiento que lucha por conseguir su mirada y su sonrisa, el valor de
enfrentar un amor tan silencioso, el temor de que se entere; el miedo de
encontrarle de frente y decirle en sus oídos palabras tan bellas que inspiran
el corazón y el sentimiento, el miedo de decirle un te amo, el temor de decirle
un te amo, el temor de decirle un te quiero. Estas letras son mi
mejor consuelo aunque sé que eres una quimera, siento hoy un
poco de tristezas, pero tan solo pensar en ti, llenas mi día, muchas
veces pienso que ya desvarío, debido a que mi amor es incomparable.
Mi amor por
siempre y para siempre.